
Los baños de sauna han sido una práctica común en diversas culturas desde tiempos remotos, desde las banyas de la antigua Rusia, los mushi-buro del Japón, las termas romanas hasta los temazcales aztecas1. Pero, ¿Qué hace que esta práctica sea tan popular y perdurable? La respuesta radica en los numerosos beneficios que aporta a nuestra salud y bienestar.
1. Mejora la Longevidad
Estudios recientes han encontrado una relación entre la frecuencia de uso de la sauna y una mayor longevidad1. Los individuos con una buena condición cardiorrespiratoria que además toman saunas con regularidad, gozan de una reducción sustancial en el riesgo de padecer eventos cardiovasculares fatales y de mortalidad por todas las causas1.
2. Beneficios Cardiovasculares
Una sesión de sauna es un esfuerzo físico y a largo plazo tiene efectos positivos similares a los del ejercicio. Esto se debe a que el ritmo cardíaco de una persona en la sauna aumenta a los mismos niveles que cuando realiza una actividad física moderada1. Además, un baño de sauna regular estabiliza el sistema nervioso autónomo, reduce la presión arterial, la inflamación, el estrés oxidativo, la circulación del colesterol malo, la rigidez arterial y la resistencia vascular2.
3. Beneficios para la Piel
El calor generado en una sauna provoca que los poros de la piel se abran, lo que ayuda a eliminar las impurezas y las células muertas. Esto resulta en una piel más limpia y suave. Además, el sudor producido durante un baño de sauna puede ayudar a hidratar la piel, mejorando su elasticidad y tono.
4. Alivio del Estrés
Los baños de sauna también son conocidos por sus beneficios para aliviar el estrés. El calor relaja los músculos del cuerpo, alivia tensiones y promueve un estado mental de tranquilidad y relajación. Además, los baños de saunas liberan endorfinas, ayudan a conciliar el sueño y actúan como antiestrés3.
5. Desintoxicación
Ir al sauna sirve para eliminar alcohol, nicotina, sodio y combatir el colesterol3. El calor intenso hace que el cuerpo sude, liberando toxinas acumuladas en el organismo.
6. Alivio del Dolor Muscular y Articular
El uso del sauna reduce las dolencias osteomusculares3. El calor ayuda a relajar los músculos tensos y alivia el dolor en las articulaciones.
En conclusión, los baños de sauna ofrecen una variedad de beneficios para la salud que van desde mejorar la longevidad hasta aliviar el estrés y el dolor muscular. Sin embargo, es importante recordar que no todas las personas son aptas para tomar saunas1, por lo que siempre es recomendable consultar a un profesional de la salud antes de comenzar cualquier nueva rutina de bienestar.